Aneurisma de aorta

| lunes, 14 de diciembre de 2009

Un aneurisma es un ensanchamiento anormal de una arteria.
Aneurisma



Una pared arterial debilitada va ensanchándose a medida que le es bombeada sangre, y acaba creándose una especie de globo con forma de huevo, con una pared muy débil.

Un aneurisma se puede dar en cualquier arteria del organismo, pero se producen de modo más frecuente en la aorta (la arteria más grande del organismo), especialmente entre el nivel de los riñones y el de las grandes arterias de las piernas (aneurisma de aorta abdominal).

También se pueden dar en la parte superior de la aorta (aneurisma de aorta torácica), mucho más peligrosos que los abdominales, por su mayor tendencia a disecar, es decir, a romper toda la pared de la arteria aorta, lo que pone la vida en serio peligro.

Los aneurismas de aorta afectan a gente mayor de 60 años, y son en gran parte resultado de arteriosclerosis, aunque la hipertensión favorece su desarrollo. Como no suelen dar síntomas, el diagnóstico suele hacerse por una ecografía abdominal o un Scanner (tomografía axial computerizada o TAC).
Aneurisma

COMPLICACIONES: ROTURA DEL ANEURISMA

Tanto en aorta abdominal como en aorta torácica, la rotura de un aneurisma produce un cuadro agudo de shock, con peligro de muerte. La rotura puede sobrevenir mediante un proceso que se llama disección, por el cual la pared de la arteria se rasga a lo largo como una tela (aneurisma disecante de aorta). Este cuadro, cuando sucede en la aorta torácica, se precede de un intenso dolor torácico similar al de un ataque al corazón, y de una extrema ansiedad o sensación de muerte inminente.

TRATAMIENTO

Si se descubre a tiempo, un aneurisma puede ser tratado sin mayores problemas.


Si el aneurisma es pequeño, y está localizado en aorta abdominal, se puede seguir la evolución sin más mediante ecografías periódicas, sin más cambios en su vida.

Si el aneurisma es grande, se está expandiendo, o su localización es peligrosa, el tratamiento consiste en sustituir la porción aneurismática de la arteria por otra arteria artificial de material sintético.
La operación es relativamente segura si se hace antes de la ruptura del aneurisma, pero los operados después de la ruptura del aneurisma tienen un pronóstico peor: menos de la mitad llegan a sobrevivir.

También puede tratarse mediante la colocación de una una prótesis expansible por dentro del vaso sin necesidad de cirugía abierta (a través de los vasos de las extremidades). El aneurisma permanecerá, pero la sangre circulará por el interior de la prótesis.